Hace unos días un lector me propuso hablar de un tema tremendamente interesante que es MUY necesario dentro del mundo de la seducción.

En la Santa Doctrina de la Seducción, se advierte una y otra vez de lo desastroso, humillante y nefasto que es para un hombre que una mujer le quiera sólo como amigo. Este punto de vista es comprensible porque, para alguien que no ha tenido éxito con las chicas, el “soloamigueo” es algo que se repite una y otra vez. Entiendo que ser el amigo “mimosín”, donde la chica se desahoga con nosotros de los malos ratos que han tenido con sus amantes, no es plato de buen gusto para nadie.

Pero el problema es que por intentar evitar esto, hemos llegado a un punto en el que hemos desarrollado una “amigafobia” que consiste en que JAMÁS en la vida podemos permitir que una mujer del planeta tierra tenga ni un solo sentimiento de amistad con nosotros, los hombres. Tan obsesionados estamos con no caer en el saco de los amigos, que lo que ocurre al final es que NO somos capaces de tener relaciones de amistad con ninguna chica, y mucho menos con una atractiva.

Voy a decir públicamente que esto NO es Alfa, ni lo será nunca. Digo yo que entre los dos extremos tendría que poder haber un punto de equilibrio. Una cosa es ser un amigo Beta, de segundo nivel, en el que la chica nos pisotea y descarga en nosotros su porquería emocional sin dar nada a cambio y otra muy distinta es crucificar al sexo femenino de por vida y no ser capaces de tener amigas normales que enriquezcan nuestra vida.

Lo primero que tenemos que aceptar es que NO se puede gustar a todo el mundo. Estoy de acuerdo en que, en general, si una chica nos gusta lo ideal será que pueda pasar algo “más”. Es algo muy natural. Pero en este universo no todo es como nosotros queremos y hay muchas veces que las cosas, simplemente no pueden ser. O bien ella puede tener pareja. O bien la podemos tener nosotros. Es posible que a ella no le gustemos, o que descubramos que ella tiene algún rasgo que nos incomoda y que haga que, aunque ella sea una chica muy atractiva, una relación estable con ella no sea posible y que prefiramos tenerla como amiga porque tampoco es una chica que queramos tener para algo esporádico puramente sexual. Etc.

Todo esto es parte de la vida. Las amigas existen y deben existir. Hay personas maravillosas que son hombres y personas maravillosas que son mujeres. Perderse la aportación que el 50% de la población podría tener en nuestra vida, por estar TAN obsesionados por tener sexo con ellas es algo que muestra muchísima necesidad y muy poca fortaleza espiritual y personal.

Ser líder/Alfa implica tener tribu. Y esa tribu debe tener mujeres también. Debe ser una tribu que nos haga crecer como personas y que nos complemente. Tener amigas es básico. Es algo que demuestra categoría humana y que nos posiciona como gente que NO nos vemos arrastrados hacia nuestro instinto más primario. Es síntoma de evolución y de inteligencia.

Tener amigas también es una actitud. Es una actitud que deja claro que la persona, al margen de su atractivo, realmente nos interesa. Y que la calidad humana es una cualidad que GENUINAMENTE valoramos.

Para conquistar a una mujer atractiva es muy importante que ella note que estamos con ella por algo más que su físico. Es básico que sienta que no estamos desesperados por obtener un resultado sexual de la interacción y que su compañía es algo de lo que disfrutamos de por sí, al margen de lo que luego pueda pasar.

Tener “amigafobia” nos va a hacer proyectar lo peor de nosotros. Y es una forma muy poco inteligente de comportarse, porque si no somos capaces de tener amigas, ni de relacionarnos con normalidad con ellas…estamos jugando totalmente en nuestra contra.

P.D. Muchas gracias, Germán, por la idea