Hoy os traigo un intersante vídeo sobre tribus. Imagino que para la mayoría de los lectores del blog, el ejemplo de este vídeo es una tribu un tanto radical y que nos es un poco ajena…pero no deja de ser muy interesante. El vídeo muestra la historia de dos “heavys” anti-sistema de la capital española que tienen una forma de vida muy diferente a la del resto, pero con bastante congruencia y puntos interesantes. Aunque no podamos sentirnos identificados con ellos directamente…sí que es bueno conocer estos casos para darnos cuenta de que sólo nosotros mismos podemos saber lo que es congruente dentro de nuestra vida y lo que nos hace felices. Nadie más puede saber cuál nuestro camino.
P.D. Gracias a Holmes por pasarme el vídeo.
Por una parte me alegro de que hayan dejado las drogas, por otra, es el tipo de gente que nos da mala fama a los peludos
Curioso. Por cierto ¿una tribu jodida para sargear ¿no?
Un saludo,
Zerocould
Totalmente de acuerdo
En algunas cosas que dicen estoy completamente de acuerdo con ellos; en otras, en completo desacuerdo. Mi conclusión: estos estan podridos de dinero, ¿13 años sin trabajar? vamos hombre!!
Un saludo.
Julio
Sí es una tribu jodida para sargear, porque se basa en una música dura que, para las chicas, al menos en España y mucho más antes que ahora, no gusta en la misma proporción, con lo que te puedes encontrar que de 75 u 80 chicos hay 20 chicas. Con lo que no es de extrañar que te puedas encontrar heavies ___como yo lo fui___ “reciclados” que, ante tal disparidad de proporciones, se refugien en otras tribus al priorizar antes las relaciones, el sexo o el amor a unos gustos musicales que no constituyen razón suficiente como para hacer de ellos una forma de vida; cosa que sí le ocurre al heavy de verdad, el cual vive su música como un sacerdocio un tanto a la contra, como una reivindicación, como un gesto de rebeldía, y de ahí esa persistencia, aun avanzados en años, de ese rebelde ego adolescente que les hace seguir vistiendo y disfrutando de la misma manera de como cuando lo eran, dando esa imagen como de eternamente jóvenes tanto de aspecto como de espíritu. ¡Auténticos!