Rarezas
Hasta ahora hemos analizado cosas que más o menos tenían cierto sentido o que, al menos para mí, eran relativamente predecibles… pero en el artículo de hoy voy a comentar aspectos que me han llamado mucho la atención y que no habría pensado a priori jamás que podrían ser atractivos para una chica.
– Ella dice no, él dice sí. Algo que ocurre con muchísima frecuencia en el libro es que él, de forma controladora, sugiere que ella haga algo. Ella se niega al principio… él insiste. Discuten. Al final ella lo hace y, después de hacerlo, en secreto ella agradece que él haya insistido y se da cuenta de que era mejor así. En alguna ocasión ella se niega, le “desobedece” y al final las cosas salen mal. En ambos casos, la conclusión es que él tenía razón. Es muy curioso cómo la novela siempre acaba poniendo la balanza a favor de Grey y de su patológica obsesión por el control. Ana se niega, refunfuña y se rebela… pero secretamente le admira por tener razón, y se siente atraída hacia su excesivo control y poder.
– La corbata. Un elemento que aparece mencionado muchísimo, sobre todo en las escenas sexuales es la corbata (y el traje). La corbata es uno de los grandes iconos eróticos del libro. No en vano, es una de las imágenes de la portada. Yo no sabía que esta prenda tenía tanto “morbo” para las chicas, pero tiene lógica, al ser uno de los grandes símbolos del poder, y el mundo de los negocios.
– Ropa seria y normal. Grey jamás iría pavoneado o llamando la atención. Su look es totalmente serio y formal. Nada de colores llamativos, nada de ropa de sport (sólo cuando está en la absoluta intimidad de su hogar, y ni aún así es muy informal). Por el contrario, viste excesivamente formal, de traje y transmitiendo estatus y seriedad. Esto a la protagonista le encanta. Y cuando él viste con vaqueros, para ella eso es una absoluta revolución en cuanto a “rebeldía sexual”. Me da la sensación de que los hombres últimamente estamos intentando vestir un poco como las chicas, llamando la atención y llevando ropa sexy, enseñando más cantidad de piel, con colores llamativos… y quizá eso sea un error. Es muy posible que ellas se sientan más atraídas hacia ropa que transmita estatus, autocontrol y no-necesidad de destacar.
– Dudas por todo. Anastasia (la protagonista) se pasa todo el libro analizando y teniendo dudas por todo. Sus diálogos interiores no son JAMÁS de certidumbre. Nunca está segura de absolutamente nada. Pase lo que pase, y haga lo que haga él, ella piensa que algo va mal. Y duda de si las cosas no tendrán algún fallo del que no se ha dado cuenta. No sé si será igual en todas las chicas… pero me da la sensación de que son, efectivamente, mucho más analíticas que nosotros. Y que si tienen dudas, no tiene por qué ser algo malo. Quizá sea, simplemente, lo normal.
– Mandón. Christian Grey es mandón a más no poder. Controlador y mandón. Siempre está dando órdenes. Intenta controlarlo todo y no deja que ella haga prácticamente nada sola. Está encima de todo y la dirige constantemente. Esto a ella le irrita pero, a la vez, le atrae. De hecho, algunas de las formas cariñosas en las que ella le llama a él son: “obseso del control”, “mandón”, etc. Conscientemente nos dicen que no, pero luego novelas como esta reflejan que en el fondo… puede que haya una componente instintiva y evolutiva que hace que las mujeres siguen prefiriendo al “macho alfa dominante” y controlador, porque es mejor protector que otro que no lo fuera. Desde luego parece ser una de sus fantasías.
– Se preocupa. Grey trata a Ana como su hija. Se preocupa enfermizamente por ella como lo haría un padre con un bebé. Está pendiente de todo. Le pone “niñera” para que la vigile en todo momento. Estudia todos sus movimientos. No para de preocuparse por su comida, su salud, etc. Y así, hasta el infinito. Una vez más, esto a ella le irrita, pero le atrae. Esta es una de las grandes constantes del libro: cuanto algo más la irrita a ella… más la atrae. Deberíamos meditar esto… porque no es nada fácil diferenciar cuándo una chica está irritada por “exceso de atracción” (lo que significa que vamos por el buen camino). Y cuándo lo hace porque realmente está incómoda y cogiéndonos “manía”. Pensaré sobre ello con detenimiento…
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Muy buen análisis… y muy curioso, la verdad. También ocurre una cosa, y es que en todo el movimiento que ha generado este libro, hubo dos “facciones” claramente diferenciadas (o al menos que yo pude observar):
– Chicas a favor del libro, a las que les encantó (y por lo que me consta, suelen ser chicas con una actitud sexual mínimamente abierta).
– Chicas en contra del libro, e incluso tachándolo de excesivamente “machista” (algunas incluso sin haberlo leído!)… diría que estas son chicas más conservadoras en cuanto al sexo.
Vamos… que el libro, en mi opinión ha sido un fenómeno porque ha desatado la sed sexual de muchas mujeres, mientras ha creado polémica en las demás, con lo que creo que volvemos a lo de siempre… le gustarán a las mujeres realmente lo que se representa en el libro? Pues… depende del tipo de mujer que tengamos delante jajaj.
Gracias por el artículo!
Oliver conozco un par de mujeres que practican un sexo mas abierto que el del libro, porque sus parejas son mis amigos ( bondage, vibradores, sumisión) y el libro les ha aburrido muchísimo y lo han dejado a medias.
Creo mas bien que el libro es una fantasía para la mayoría de mujeres que no están con hombres con la confianza suficiente para darle sexualmente a la mujer lo que ellas necesitan, que son como sabemos la mayoría.
Otro tema aparte es el feminismo opresivo que ya sabemos como funciona en estos casos, en lo que si estoy de acuerdo contigo Oliver.
Ante todo esta la libertad, y por mucho cariño, protección y elegancia que irradie el personaje de este libro, sin libertad ninguna mujer se hallara feliz. Si la libertad se la tiene que dar un hombre a una mujer, estaremos actuando, en mi opinión, desde una perspectiva demasiada arrogante e inmadura.
Gracias por esta disección, Álvaro.
Gonzalo
Oliver, a las personas que critican algo sin leerlo… yo directamente ni las escucharía. Qué menos que leer el libro antes de opinar negativamente sobre él!
Y respecto a si a las chicas les gusta o no… tienes razón. No tiene por qué ser cierto que todo lo que aparece en el libro sea necesariamente el gusto de las chicas. Pero no olvidemos que es el libro más vendido de la historia. Eso no es casualidad tampoco!
Gracias a ti por comentar!!!
Un abrazo fuerte!!
Totalmente de acuerdo, David. Si la mayoría de los hombres tratara a las mujeres de otra forma… todo sería muy distinto.
Un abrazo!
Gonzalo, no estoy muy seguro de si entiendo lo de la libertad. A qué te refieres con libertad?
Un abrazo!
Gracias Álvaro, primero he de decir que esto es una opinión, no he leído el libro (no creo que lo haga) pero me baso en el análisis que has hecho de Grey, sobre todo en el punto 6 de este post, tampoco lo cierras del todo.
Punto 6 dice: Está pendiente de todo. Le pone “niñera” para que la vigile en todo momento.
La palabra libertad significa mucho y es para cada cual como la sienta. Lo que yo quiero decir es La libertad de ser una misma, como lo veo, repito por tu análisis, es que Grey es un Ser ideal y no natural, que intenta poseer hasta el punto enfermizo. Una cosa es proteger, ser cariñoso, etc y la otra dominar la vida de una persona. Con lo cual para mi Grey no es un modelo de hombre a seguir.
Por supuesto que Grey no es un personaje real y no debe imitarse literalmente. Pero sí que me parece interesante analizar que esa hiperprotección para muchas mujeres (por supuesto no a todas) les parece atractivo y sexy.
Imitar! jaja. Nunca.
Álvaro, sabes lo que haré! ¿leer el libro?, o mejor leer muy bien el análisis que has hecho, ya lo pensare.
Decirte que el último Volumen numero 6 sobre Grey me ha gustado mucho, resuena mejor con lo que me gusta, en contrapartida con el punto de vista de otros post de este análisis. Al final será como decía mi abuelo “cada maestrillo tiene su librillo”. Y tus puntos de vista me interesan.
un fuerte abrazo