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El miércoles fui con mi queridísimo amigo Antinoo de compras a un centro comercial y presencié algunas de las situaciones más divertidas y con más chispa sexual que he visto en mucho tiempo.

Para los que no lo sepáis, Antinoo es un grandísimo natural que tiene un éxito arrollador en cuanto a mujeres se refiere. Pues bien, el otro día estábamos viendo ropa en un Zara y, aunque no veíamos nada que nos gustara, Antinoo decidió aprovechar la ocasión para conocer a una mujer preciosa que estaba trabajando de dependienta.

Se acercó a ella, la miró, sonrió…y dijo:

Antinoo: perdona, ¿tienes un momento?.

Chica: claro, dime.

Antinoo (después de una pausa, con su correspondiente mirada y sonrisa): es que no sé cómo decirlo…eres lo más bonito que he visto en todo el día…y me moriría de vergüenza si me fuera de aquí sin decírtelo.

La chica se puso roja, sonrió…intercambiaron un par de frases más y a los 20 segundos, Antinoo volvía con el teléfono de la chica en cuestión.

No digo esto para que todos digáis: puff, Antinoo es una máquina (que lo es, por cierto). Simplemente lo comento para que todos nos demos cuenta de que cuando realmente tenemos seguridad y confianza en nosotros mismos…todo es increíblemente sencillo. Basta con ser sincero, ir sin prisa y no tener miedo de avanzar. Si nuestro Juego Interno es bueno, TODO ES MUY SENCILLO.

A Antinoo no le hizo falta ni hablar el idioma “sargealino”, ni usar chulifresco divertido, ni negas, ni rutinas, ni ninguna tontería similar. Es más, en su afán de transgredir la Santa Doctrina de la Seducción, cometió la desmesurada desfachatez de decir “perdona”. ¿Cómo pudo Antinoo cometer el terrible error de decir perdona? ¡Que Dios le coja confesado! ¡Eso sólo lo dicen los fruscos!

Lamento decir que los naturales también dicen “perdona”. En muchas partes del planeta a eso se le llama “educación” y no está penado con la muerte, ni nada parecido.

No puedo evitar pensar en la cantidad de abridores, rutinas, trucos, guiños y tonterías que leemos a diario en los foros y que llevan una inversión de tiempo absurda en comparación con el tiempo que se requiere para tener éxito cuando la actitud es correcta.

A todas las mujeres de este planeta les gusta sentirse especiales. A todas les gusta oír algo bonito y todas se sentirán atraídas por un hombre que lo diga sin mostrar necesidad, con aplomo, seguridad y buen lenguaje corporal.

P.D. Bueno, quizá exageré al decir todas. Alguna excepción habrá…