por mintineo12+ | Sep 19, 2011 | Todo
Si tenemos en cuenta por qué es tan importante ser pacientes…nos damos cuenta de que no sólo lo es por razones culturales, sino que tiene una función evolutiva muy importante.
La mujer necesita comprobar muchas cosas antes de sentir verdadero interés por un hombre. No se puede fijar en el primero que pasa, ni se puede permitir el lujo de ser poco selectiva. De hecho, la mujer es, socialmente, muchísimo más inteligente que el hombre en parte por esto mismo.
¿Un hombre puede engañar a una mujer yendo de algo que no es? Sí. ¿Esa mentira puede mantenerla eternamente? No.
Y en este último concepto es donde está la clave. La mujer busca ciertos rasgos realmente valiosos en un hombre, y su obligación es “testear” al hombre para ver si realmente los cumple. Pero hay muchos rasgos que pueden falsearse y la única forma de ver si el hombre los cumple es esperando y poniéndoselo difícil en términos temporales.
La única manera en la que una mujer puede comprobar realmente nuestro nivel de necesidad con respecto al sexo y nuestra consiguiente abundancia y actitud real en nuestra relación con las mujeres es sometiéndonos a una prueba temporal. Ella nos hace esperar, nos lo pone difícil, nos frena para comprobar cómo de ansiosos nos ponemos.
Así mismo calibra cómo manejamos los rechazos y si somos capaces de avanzar a pesar de la “adversidad”.
No nos podemos estancar, pero tampoco podemos correr. Correr es IGUAL de malo que no avanzar. Tenemos que ser capaces de encontrar un equilibrio y ajustarnos a la velocidad que ella tolere y en la que ella nos guíe con su lenguaje no-verbal a la hora de interactuar con nosotros.
Ser capaces de esperar en ciertos momentos clave es algo crucial en una interacción. Y, si en esos momentos, perdemos la paciencia e intentamos avanzar demasiado rápido, dejándonos llevar por la necesidad, seremos descalificados del juego. Especialmente si estamos con mujeres muy atractivas que, por norma general, toleran mucha menos proporción de errores al comienzo de la interacción.
Además, y como ya dije en un artículo anterior, la paciencia y la capacidad de aguantar la adversidad es algo IMPRESINCINDIBLE para conseguir metas a largo plazo. Hay muchísimas metas importantes que requieren disciplina, paciencia y trabajo a largo plazo para ser conseguidas.
Así que, a las mujeres, nuestro nivel de necesidad a la hora de relacionarnos con ellas también les da una buena indicación de cómo de disciplinados, perseverantes y pacientes podemos ser en temas de crecimiento personal, riqueza, negocios, estudios, etc.
El resumen: ser pacientes nos hace PODEROSOS EN TODAS LAS FACETAS DE NUESTRA VIDA.
Nadie tiene éxito siendo impaciente. Es algo evolutivamente fundamental. Y si pecamos de falta de paciencia estaremos fallando en lo más básico.
por mintineo12+ | Sep 16, 2011 | Todo
Hace algunas semanas, Mario Luna publicó en su muro de Facebook este vídeo que me hizo mucha gracia y me parece una forma estupenda de tomarse con humor todas estas nuevas corrientes de motivación y liderazgo que tan de moda están en las empresas. ¡Así que he decidido publicarlo yo también!
por mintineo12+ | Sep 14, 2011 | Todo
Una de las grandes cosas que suelen faltar en las conversaciones cotidianas es la falta de pasión. Nadie nos va a considerar personas interesantes si no somos capaces de sentir verdadera pasión por lo que hacemos y decimos. De hecho, la palabra apasionado, se suele utilizar en muchos casos casi como sinónimo de persona interesante.
Muchísimas veces vemos en comentarios de mujeres que una de las cosas que más les gustan de un hombre es la pasión con las que hace las cosas. Como un guitarrista de rock cuando se deja la piel en el escenario….o como un pintor cuando se queda absorto en su obra. Son rasgos MUY atractivos para una mujer. Y cuanto más nos acerquemos a ese ideal, más tendremos la atención de la chica.
Una persona apasionada es una persona enérgica, decidida, asertiva y con convicción en lo que hace. Todos ellos son rasgos muy Alfas, que subcomunican que tenemos una realidad poderosa. El hombre pasional lucha por lo que cree. La persona apática deja que las cosas pasen sin hacer nada. Siendo pasional estamos demostrando que, evolutivamente, estamos dispuestos a luchar y defendernos del mundo que nos rodea.
Así que, cuando estemos en una conversación tenemos que ser capaces de transmitir pasión y decisión en las cosas que decimos. Nadie nos va a tomar en cuenta si no somos capaces de expresar nuestros pensamientos con convicción y entusiasmo. Los grandes líderes son, por definición, MUY pasionales. Y los grandes oradores, también.
En el primer artículo de esta sección dije que lo importante es que la otra persona hable de sí misma…y esto SIGUE SIENDO CIERTO. No me estoy desdiciendo, sino complementando. Tenemos que ser capaces de hacer que la otra persona hable de sí misma y se abra a nosotros. Pero ella es probable que NO tenga interés en abrirse si no nos considera personas valiosas e interesantes. Habrá silencios…y preguntas en las que ella pondrá a prueba si realmente somos personas interesantes que tienen la intención genuina de conocerla o no.
En esos vacíos… tendremos que ser capaces de expresar nuestros pensamientos de forma pasional. Y cuando ella, de forma genuina (esto ocurrirá tarde o temprano) se interese por algún aspecto de nuestra vida…más que nunca tendremos que ser capaces de expresarnos con convicción y energía.
No es cuestión de hacerlo constantemente, porque una persona que no es capaz de no ser pasional, tampoco es Alfa. Es más un tema de dar pinceladas. Tenemos que ser capaces de pincelar la conversación con pasión en ciertos momentos clave.
Tenemos que ser capaces de escuchar y centrarnos en la otra persona…y, a la vez, cuando se nos presente una situación en la que nos viene una idea a la mente en la que creemos firmemente…defenderla con pasión y decisión, sin importarnos lo que piense la otra persona. Tampoco hace falta salirse de tono, pero sí creer en lo que uno dice. Ella tiene que sentir que somos buenos defensores de nuestras ideas y que no tenemos miedo del rechazo que esas ideas puedan despertar.
por mintineo12+ | Sep 12, 2011 | Todo
Como hombres debemos intentar ser excepcionales. La mejor versión de nosotros mismos. Crecer siempre y mejorar en todo lo que podamos…y perseguir nuestro ideal humano. Pero eso no está reñido con la naturalidad.
Ser Alfa no significa hacer las cosas de forma impostada, forzada o artificial. Ser excepcional no siempre consiste en hacer cosas excepcionales. También consiste en ser capaz de NO necesitar hacer cosas excepcionales. Como siempre digo, no hay nada más impresionante que alguien que NO necesita impresionar.
Una mujer, a nuestro lado necesitará ciertas cosas extraordinarias…ciertos momentos de fortaleza y determinación. Necesitará que hagamos cosas. Pero eso será en momentos puntuales. El resto del tiempo necesitará de nosotros que seamos personas normales, simpáticas, divertidas, empáticas y no necesitadas que disfruten del momento, que fluyan con ellas y que sean naturales.
Digamos que, de fondo, tiene que haber NORMALIDAD.
Uno de los mayores problemas que tiene la Santa Doctrina de la Seducción es que nos animan a que metamos las cosas con “calzador”. Es decir, que no le dan importancia al hecho de que sea un buen momento para hacer ciertas cosas.
Se trata de encontrar un equilibrio. Alguien que mete las cosas sin venir a cuento, con prisas es alguien NECESITADO. Y alguien que nunca avanza o que no es capaz de tomar la determinación en el momento preciso es alguien con MIEDO. La clave está en encontrar un prudente, racional y poderoso término medio que nos mantenga en una normalidad y fluidez en la que avanzamos, pero sólo cuando la situación está propiciándolo.
No te preocupes, que a lo largo de la interacción habrá cientos de situaciones perfectas para mostrar nuestras cualidades Alfa…el tiempo juega a nuestro favor. Si somos realmente poderosos a nivel interno, antes o después habrá situaciones que lo evidencien. No necesitamos hacer nada más que estar ahí sin miedo de avanzar cuando sea preciso.
Pero es muy importante que mientras estemos ahí, fluyamos con el momento y seamos gente normal. Más o menos igual de natural y espontáneo que seríamos con un buen amigo, nuestro hermano o un compañero de clase. Ella necesita esa familiaridad, esa normalidad. Si no, jamás podrá confiar en nosotros, se sentirá insegura, incómoda y sentirá que algo NO va bien.
El proceso de conquista o atracción hacia una mujer podría resumirse en lo siguiente:
“Mantener una actitud de normalidad similar a la que tendríamos con un buen amigo, pero siendo capaces de ofrecer, en ciertos momentos puntuales, varios rasgos que la mujer necesita de nosotros como hombres.”
por mintineo12+ | Sep 9, 2011 | Todo
El otro día llegó a mis manos este interesante vídeo sobre el Reiki y su aplicación en hospitales como método complementario para un montón de tratamientos médicos. Me ha parecido fascinante y por eso he querido compartirlo con tod@s vosotr@s.
P.D. Muchas gracias a Marcel, por pasármelo.
por mintineo12+ | Sep 7, 2011 | Todo
Existen dos tipos de preguntas: las abiertas y las cerradas. Las preguntas abiertas, son aquellas que no permiten una sola palabra como respuesta, sino que requieren una explicación para ser contestada. En contraposición a estas están las preguntas cerradas, que dan como respuesta una única palabra.
Ejemplos de pregunta cerrada son:
- ¿Cómo te llamas?
- ¿Vienes mucho por aquí?
- ¿Eres de Madrid?
Ejemplos de pregunta abierta son:
- ¿Cómo es que decidiste estudiar veterinaria?
- ¿Qué opinas de la crisis de oriente medio?
- ¿Por qué te mudaste a Madrid?
Ambas modalidades se pueden hacer también en forma de pequeñas órdenes afirmativas:
- Bueno, cuéntame de dónde eres…
- Háblame de ti…
- Cuéntame por qué viniste a Madrid..
Pues bien, Santa Doctrina de la Seducción nos tiene TOTALMENTE prohibido hacer preguntas cerradas. Parece que si alguien pregunta algo que puede ser contestado con una sola palabra el mundo se acabará y no podremos procrear jamás. Pues yo USO preguntas cerradas. Sí, lo admito. Yo pregunto el nombre, pregunto a qué se dedican y pregunto de dónde son. También pregunto el nombre de su acompañante…e incluso el de su perro, si tuvieran. Y el mundo no se ha acabado. De hecho, a todas las mujeres con las que he tenido algún tipo de relación les había preguntado el nombre al comienzo de la interacción. ¡Debo estar loco!
Ahora bien, hay parte de razón en lo que dicen en la Santa Doctrina. Si en una conversación sólo hacemos preguntas cerradas, es imposible conectar con la otra persona. Lo que no nos dicen es que si sólo hacemos preguntas abiertas…lo que parecemos es idiotas. Las preguntas cerradas SON necesarias. Una buena conversación tiene que tener una mezcla de ambas. Las preguntas cerradas nos dan datos y las abiertas nos explican los datos.
Es tan importante tanto tener los datos, como tener las explicaciones que hay detrás. Y no, para preguntar los datos no hace falta ser original. Al contrario, la normalidad no viene mal. No viene mal ser una persona NORMAL que pregunta de forma NORMAL. A una mujer no vamos a seducirla porque fuimos capaces de preguntar su nombre con una pregunta abierta. A una mujer le gustaremos por ser personas interesantes, por saber escuchar y por ser personas realmente atractivas…intentar impresionarla con cada pregunta y con la forma de hablar es garantía de fracaso.
Así que toda conversación debe incluir ambos tipos de preguntas. Y como dije en el artículo de la semana pasada….tenemos que dirigir las preguntas en busca de encontrar cosas originales, distintas y únicas en la otra persona. En esa dirección es donde nuestro cerebro nos va a dar una curiosidad GENUINA y donde preguntaremos con profundidad, verdadero interés…siendo capaces de escuchar realmente atentos.